El Laboratorio de Hemoderivados de la UNC recibió hoy la visita del secretario de Calidad en Salud de la Nación, Arnaldo Medina, y del ministro de Salud de la Provincia de Córdoba, Diego Cardozo.

Los funcionarios fueron recibidos por el director ejecutivo del Laboratorio, Héctor Gabriel Tavella, y los gerentes de Administración y de Operaciones, Natacha Beltrán y Daniel Allemandi, respectivamente.

Durante la reunión compartieron información sobre el funcionamiento de este laboratorio farmacéutico universitario y el desarrollo de la Gammaglobulina Enriquecida con Anticuerpos Anti Sars-CoV-2, una alternativa para tratar a pacientes con diagnóstico positivo de COVID-19.

Como resultado de la reunión, el funcionario nacional se comprometió a prestar su apoyo al proyecto de desarrollo de este medicamento.

El titular de la cartera sanitaria provincial, por su parte, expresó la intención de la provincia de enviar el plasma recolectado de personas recuperadas de COVID-19 al Laboratorio para que sea destinado a la elaboración de la gammaglobulina.

Del encuentro también participaron el secretario de Salud de la Provincia de Córdoba, Pablo Carvajal, el director del Hospital Rawson, Miguel Díaz, y el decano de la Facultad de Ciencias Médicas de la UNC, Rogelio Pizzi.

Producción de la gammaglobulina anti SARS-CoV-2

Con el propósito de dar respuestas a las necesidades de salud de la población en el marco de la pandemia, el Laboratorio de Hemoderivados de la UNC lleva adelante la elaboración de una gammaglobulina enriquecida con anticuerpos anti SARS-CoV-2.

Ya se elaboraron dos lotes de esta gammaglobulina, que se propone como una alternativa terapéutica y biológicamente segura. Se trata de un medicamento que el laboratorio produce y distribuye desde hace 35 años a partir del plasma humano. El diferencial en este caso, es que el plasma utilizado como materia prima para su elaboración posee anticuerpos anti Sars-Cov-2.

Si bien es un medicamento que el Laboratorio de Hemoderivados produce hace tiempo con eficacia comprobada, fue necesario adaptar los procesos productivos a una escala mucho menor que la habitual, dada la escasez de materia prima disponible. También se desarrollaron y validaron técnicas de detección y cuantificación de anticuerpos para este virus, prácticamente desconocido hasta hace un año.

La materia prima necesaria para la elaboración de estos primeros lotes se obtuvo, por un lado, de las donaciones voluntarias de plasma de personas recuperadas de COVID-19. Y, por otro lado, del plasma enviado por los hemocentros de todo el país, obtenido de las donaciones solidarias de sangre.

El medicamento cuenta con registro provincial y con la autorización del Ministerio de Salud de Córdoba para realizar el estudio clínico de fase IV en el Hospital Rawson y en el Hospital Nacional de Clínicas de Córdoba.